Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
El kit de primeros auxilios para mascotas existe. Y tu mascota lo necesita tanto como tú el botiquín de casa.
Es muy probable que estés centrado en proteger a tu mascota y le hayas dado todas las vacunas necesarias. Pero eso no garantiza que en cualquier momento pueda ocurrir un imprevisto y necesites socorrerla tú mismo.
Imagina que se ha clavado un cristal. O piensa, por ejemplo, que estás lejos de tu casa y no puedes contactar con el veterinario. ¿Sabrías cómo actuar con un kit de primeros auxilios para mascotas? O aún más importante, ¿dispones de ese kit?
Los primeros auxilios son sinónimos de atenciones inmediatas ante situaciones concretas. Es fundamental que entiendas que esta atención está orientada a proporcionar una primera respuesta. Pero eso no quiere decir que deba sustituirse por la atención completa veterinaria.
Sin embargo, lo importante hoy es que aprendas a estar preparado y a contar con el material necesario.
¿Qué tiene un kit de primeros auxilios para mascotas?
1.- Jabón neutro e hipoalergénico
Las mayoría de las causas que te pueden empujar a utilizar tu kit de primeros auxilios para mascotas están relacionadas con heridas. Y, como sabes, no puedes desinfectarlas sin realizar una limpieza previa. Pero, ¿cómo se limpia una herida de forma correcta? Existen varios productos que puedes utilizar:
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Jabón neutro e hipoalergénico adaptado a mascotas.
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Pastilla de jabón de vaselina.
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Pastilla de jabón de coco.
2.- Suero fisiológico
Es probable que ya lo sepas, pero en ningún kit de primeros auxilios para mascotas debe faltar el suero. Se trata de la mejor solución para limpiar tanto las heridas como los ojos de tu mascota. Por lo tanto, su utilización es idónea cuando surja cualquier herida o afección en los ojos.
Aunque el suero no se conservará bien si no sabes cómo guardarlo. Lo más recomendable es que compres envases monodosis con cerca de 5 ml de suero. Son aquellos que sirven para una aplicación.
Asimismo, procura estar siempre pendiente de la fecha de caducidad de cada envase.
3.- Esparadrapo, gasas y vendas
Lo más recomendable es que tanto las vendas como las gasas de algodón sean estériles. Son un elemento imprescindible para la cura de las heridas, sobre todo para poder crear un pósito casero.
El esparadrapo, además, también debería ser de tejido hipoalergénico para que el pelo de tu mascota no tenga problemas para tolerarlo.
4.- Gel de aloe vera puro
El gel de aloe vera puro siempre viene bien. De hecho, si no tienes una planta de aloe en tu casa que pueda cumplir su función, este gel debería ser un must de tu botiquín.
Los animales también suelen sufrir irritaciones en la piel y diferentes dermatitis. El gel de aloe vera puro es excelente para cicatrizar las heridas o las quemaduras.
5.- Digluconato de clorhexidina
El digluconato de clorhexidina es un desinfectante que puede utilizarse como alternativa al alcohol, al yodo o al agua oxigenada. La principal diferencia con estos otros productos es que el digluconato de clorhexidina resulta más suave. Es decir, consigue desinfectar heridas sin irritar la piel.
De hecho, si tu mascota tiene problemas en la piel o es demasiado sensible a otros productos, éste podría ser una pieza ideal en tu kit de primeros auxilios para tu mascota.
Puedes encontrar este producto en forma de gel o loción, aunque el formato más recomendable es el spray. Lo mejor es que apliques el spray una vez la herida esté limpia.
6.- Material imprescindible
Además de todos los productos mencionados anteriormente, existe más material que no debería faltar nunca en tu kit de primeros auxilios para mascotas. ¿O acaso tu botiquín puede permitirse sobrevivir sin un termómetro?
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Pinzas. Son importantes para poder extraer garrapatas, espigas u otros cuerpos extraños.
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Termómetro. Por supuesto debe ser apto para uso veterinario. Debe ser resistente e irrompible, ya que la temperatura de las mascotas se mide por vía rectal.
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Tijeras de punta roma. Es probable que hayas tratado con ellas anteriormente. Son las tijeras que tienen la punta redonda, ideales para cortar vendas y gasas.
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Jeringuilla de plástico. Te ayudará a aplicar líquidos o medicamentos.
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Toallas. Una toalla de algodón es ideal para aplicar frío mediante compresas en caso de que tu mascota sufra algún tipo de inflamación.
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Producto específico para limpiar los oídos de los perros.
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Pomada antiinflamatoria.
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Un analgésico.
Consejos y trucos
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.